Bajón y resfriado

|
Al final llegó el bajón esperable tras el DEA. En sí, la palabra bajón me parece pija, repipi y un poco ridícula, pero describe bien ese estado de pseudodepresión en el que caes de repente, sin buscarlo, y casi de manera inevitable, tras un sobreesfuerzo, un momento o una época de tensión, de presión...

Fue más bien un vacío, una desorientación...

El síntoma más claro: en mi libreta (la libreta en la que voy apuntando todas las cosas que voy haciendo, la que utilizo para tomar notas, apuntar cosas y pensar por escrito, digamos), tengo una página en la que empecé a escribir algunas ideas sobre el artículo de investigación que estoy preparando. La página está encabezada con la fecha de ese día: 4/12/2007. Y el siguiente día que continué escribiendo en la misma página (que estaba medio vacía) fue el 15/12/2007.

Ahora mismo no recuerdo qué hice en los 10 días que quedan en medio, pero nada de investigación, seguro. Ahí está la prueba.

Me ha costado bastante retomar el ritmo normal, porque casi ni lo recordaba. Tenía muchas cosas pendientes y no sabía por cuál empezar. Ni me concentraba, ni me cundía el tiempo.

Para colmo, desde el domingo pasado ando con un resfriado no muy fuerte pero que sí me ha dejado con poca energía y poca claridad de ideas. Hoy ya empiezo a revivir.

Ayer decidí quedarme en casa, para acabar de recuperarme, y esquivar el frío y la lluvia que han decidido ya visitarnos e instalarse entre nosotros. Y, curiosamente, conseguí concentrarme y aprovechar el tiempo.

No fue el único día, y ya he ido sacando faena adelante durante la semana pasada. Pero es que, esto de lograr concentrarse, sigue siendo más una excepción que la norma, para mí. Y no puede ser.

De momento, he conseguido organizarme bien, en cuanto a qué tareas tengo pendientes. Las apunto en unas hojas en papel, al modo tradicional, ya que he comprobado que es lo que mejor me funciona. Me inventé una plantilla en Word, con recuadros, apaisada. En cada recuadro escribo una tarea y, cuando lo sé y es necesario, pongo también la fecha límite de finalización, y la duración estimada. También debería poner la urgencia y la importancia de la tarea, pero no lo estoy haciendo, ya que, de momento, controlo de cabeza cuáles son las tareas más o menos urgentes, etc.

Cuando voy tachando muchas tareas o "cuadros", entonces llega el momento de renovar la hoja. Imprimo otra plantilla en blanco, copio las tareas aún pendientes de la hoja anterior, y añado alguna nueva que pueda faltar.

He decidido separar en hojas distintas las tareas relacionadas con el trabajo y las personales. Porque otra cosa que he detectado es que estaba mezclando demasiado lo profesional y lo personal. Es un tópico, pero en mi caso, estaba siendo así. Y es difícil, porque nunca desconecto de verdad del trabajo (entre otras cosas, porque muchas veces me estaba llevando trabajo a casa), pero al menos, ahora intento ser más consciente de que las cosas que me pasen en la Universidad no deben influir en mi relación con mis amigos, mi familia y mi pareja.

Perdón por este rollo tan personal y tan de gestión del tiempo, pero me ha servido para aclarar ideas y como declaración de intenciones.

Practice makes perfect

|
Desde la semana del DEA, había abandonado casi por completo el inglés. [Es curioso que no haya sido al revés: durante la preparación del DEA, el inglés era una tarea que no me costaba demasiado esfuerzo y no me quitaba tiempo ni concentración, sino que me servía para desconectar un poco.] Ahora, estoy volviendo a usar las herramientas del método de inglés que comenté aquí.

Además del material que viene en forma de curso de inglés que está distribuyendo un periódico de ámbito nacional (y que gracias a mis padres estoy coleccionando —¡siguen financiando mi formación, de alguna forma!—), y de la revista mensual que esta empresa publica, hay una gran cantidad de recursos gratuitos a través de su web.

Ya mencioné en aquel post uno de esos recursos gratuitos (que acabo de añadir en el menú derecho del blog): el Rincón de Cloverdale ("Cloverdale's Corner, where we turn English inside out", "donde vamos a saco con el inglés", aunque literalmente sería "donde ponemos el inglés del revés"; me ha costado mucho pillar lo de "turn inside out"). Me bajé los MP3 y los tengo guardados en mi móvil (que se ha convertido definitivamente en mi reproductor de radio y MP3). Hoy he venido andando a la Universidad, y durante todo el camino he ido escuchando uno de los capítulos de este rincón (duran unos 50 minutos, más o menos).

También aprovecho cuando voy o vuelvo de la Universidad en coche para escuchar los CD del curso de inglés que he mencionado arriba. La idea es esa: machacar; repetir.

Aunque me repita, sigo diciendo que es no hace mucho cuando he descubierto que estudiar = practicar, machacar, repetir un millón de veces. Sinceramente, no sé cómo he llegado hasta aquí sin tener aprendido o interiorizado (creo que ni de manera inconsciente) ese hábito.

Puede parecer ridículo, pero, para mí, es un poco duro darme cuenta de eso, quiero decir, darme cuenta de que el aprendizaje duradero está basado en repetir, machacar, practicar... (siempre he oído lo de que todo lo que vale la pena cuesta un esfuerzo, pero para mí era más un tópico que otra cosa). Si no te apetece hacer el esfuerzo, no avanzas.

Casualmente, esta es una expresión que ha aparecido en el MP3 de Cloverdale que venía escuchando de camino a mi despacho:
Practice makes perefect

La práctica es lo que hace (conseguir) la perfección.

Es lo que llaman una frase trillada o ¿hecha?: a hackneyed expression.

[Me ha hecho gracia descubrir matices en algunas webs, acerca de esta frase: "Practice doesn't make perfect —perfect practice makes perfect".]

Algunas otras expresiones, palabras o curiosidades oídas en el MP3 y que he decidido apuntar aquí hoy (si alguien encuentra algún error, que lo corrija, por favor):
  • to be swarmed : estar empantanado, saturado, superado

  • momentum : ímpetu, velocidad (to gain the momentum, to loose the momentum)

  • bullet train : "tren bala", tren de alta velocidad

  • angry | upset | disappointed : enfadado/a | disgustado/a (enfado sin exteriorizar) | desilusionado

  • deception : engaño (no "decepción")

  • bear (oso) | pear (pera) | hair | air | care (cuidado, cuidar) | parents | apparently (por lo visto) | pair | tear (rasgar) : comparten la misma combinación de vocales en su sílaba tónica: "[eə]" (me queda la duda en apparently)
    • Por lo visto, tomaste un par de peras : Apparently, you took a pair of pears
    • Cuido el oso : I care for the bear
    • Cuido el pelo del oso : I care for the bear's hair

  • stupid | silly : tonto (falto de inteligencia; menos fuerte que nuestro "estúpido") | tonto (falto de seriedad)

  • shape up : mejorar el rendimiento, el comportamiento, ponerse en forma (darse forma a uno mismo)

  • shape up or ship out : O mejoras, o te marchas (tendrás que marcharte, no tendremos más remedio que echarte; o mejoras tu rendimiento, o te compras un barco y te piras)

  • on the spot : en el acto, en el momento, inmediatamente

  • notas (evaluación de alumnos) : grades (UK) | marks (US), aunque grades está ganando terreno en EEUU

  • civil service : administración pública

  • civil servant : funcionario/a

Soy consciente de que hablar de "un par de peras" no va a servirme para mi trabajo de investigación (el inglés que utilizamos al redactar artículos es bastante técnico y las estructuras que se suelen usar son bastante específicas), pero me gusta el inglés. Eso hacer más fácil el esfuerzo, claro.

Docentes e investigadores

|
La entrevista al Rector de la Universidad Rey Juan Carlos puede servir a los que quizás no estéis tan relacionados con el mundo universitario, o con el sub-mundo de los profesores universitarios, a entender mejor de qué va esto:

Me gusta la frase del Rector que destacan en el titular de la entrevista: "La característica principal de un profesor universitario es su doble condición de docente e investigador". No está mal que nos lo recuerden, pero, vamos, que yo lo tenía claro. Justamente por eso me gusta este trabajo: pienso que sólo dar clase o sólo dedicarse a investigar terminaría quemándome. Combinar ambas tareas, además de ser un reto, es lo que más me divierte y me motiva de este trabajo.

Profesores invitados

|
La semana está yendo bien. El lunes noté un poco de bajón, pero más que nada era cansancio, porque durante el fin de semana no descansé mucho.

De hecho, la semana se me ha pasado volando... Y el DEA, me parece que hace una eternidad, la verdad.

Sigo sin ponerme al día en la corrección de las prácticas. Este año, en lo que a docencia se refiere, estoy viviendo de rentas, la verdad. Ni siquiera he actualizado las transparencias ni las colecciones de cuestiones y ejercicios... Es normal (hay que dedicar tiempo a la investigación; y, además, estaba el DEA); sólo es que me sorprendo de que haya sido capaz de hacerlo. De todos modos, tampoco es cuestión de pasar de los alumnos (y no lo hago, creo).

Hoy ha sido un día un poco caótico. Primero, clase de 8 a 10h (y me han pasado la encuesta de evaluación del profesorado; ya comentaré algo sobre esto otro día).

Después, llevar mi antiguo ordenador personal de casa a una tienda donde te lo pueden actualizar, etc. Va tan lento, el pobre, que le cuesta siglos iniciar sesión; al final lo he tenido que dejar allí, para que le pongan más RAM y más ROM (ahora se dice más memoria y más disco duro; realmente ROM es otra cosa).

Después, vuelta a la Universidad, donde he inscrito un trabajo para un congreso a través de su página web, en el día en que terminaba el plazo (la dead line, o fecha de muerte, como decía alguien alguna vez).

Y luego, he asistido de 16 a 18h a la primera de las tres charlas que tiene previsto impartir un profesor extranjero que está realizando una estancia en nuestro Departamento. No me he enterado de mucho, la verdad. He ido más para hacer bulto que otra cosa.

[Nótese que no he puesto en ningún momento que haya parado para comer... Eso sí, he almorzado bien.]

Bueno, volviendo al profesor extranjero... Es una lástima: éramos 5 asistentes a la charla, y todos íbamos más o menos por compromiso. Es un tema del que se puede aprender, pero la gente va siempre muy a la suya, la verdad. Yo no habría ido si no es porque mi director de Tesis tiene relación con este profesor.

El hombre es muy curioso. Procede de un país de la Europa del Este, y su inglés es muy... no sé... particular, podríamos decir. Cuesta entenderle, hasta que pillas su acento, digamos.

Cuesta mucho dinero y esfuerzo traer a un profesor invitado, para que luego la gente pase de él. Es difícil dinamizar la investigación. La gente va a su bola. Me incluyo.

Me tengo que marchar... Continuaré escribiendo sobre cosas de esta semana. Aún no he contado qué he hecho después de la charla (y hasta hace un rato)...

Y ahora, ¿qué?

|
Tampoco ha sido para tanto o, al menos de momento, no he notado ningún bajón post-DEA, como ya decía al finalizar el anterior post.

Por suerte, tanto el día de la exposición como el día siguiente, pude tomarme las cosas sin prisas, pero sin pausas. He seguido trabajando normalmente, pero sin el peso de esa losa que ya comentaba en mi anterior post. Con más tranquilidad, y con un ánimo distinto; como pensando que ahora tengo tiempo para todo. O, mejor dicho, siendo consciente de que ahora ya NO hay una única cosa que consume (casi) todo mi tiempo.

Por tanto, sigo con mis tareas docentes, por tanto, y espero poder ponerme al día en la corrección de prácticas y ejercicios.

Pero también sigo adelante con todos los temas de investigación que tenemos abiertos, que no son pocos.

De hecho, hoy, después de una completita mañana de clases de 8 a 12.30h, he descansado un poco, y por la tarde hemos acudido a una reunión con una empresa para la que estamos realizando un estudio.

Hablando de los planes inmediatos... Mi compañera Póker me dio un consejo, y tiene razón. Aunque la tentación es dar carpetazo y olvidarme de todo lo relacionado con el DEA, ahora es cuando lo tengo más fresco y debería aprovechar para acabar de cerrar ese artículo de investigación que estaba redactando, justamente relacionado con el tema del DEA.

Mi Tesis NO es exactamente una continuación del DEA, como acabo de comentar en mi anterior post, así que sí que debería dedicar ya un tiempo a ese artículo, y no dejarlo para más adelante, porque después será más complicado volver a tenerlo todo en la cabeza, igual que lo tengo ahora.

Mi director de Tesis está de acuerdo con eso. Lo hemos hablado al volver de la reunión con los de la empresa.

Por otro lado, mis planes más inmediatos de investigación-consultoría serían:
  • Seguir con la colaboración que estamos llevando a cabo (hasta ahora, mi director de Tesis se ha encargado de todo el trabajo pesado, pero ahora me toca entrar un poco más en el asunto);
  • Recomenzar con la Tesis; retomarlo donde lo dejé a finales del verano
  • Seguir con otras colaboraciones que llevamos en marcha, pero que, de momento, no dan mucho trabajo.
  • Lo primero, como he dicho, EL ARTÍCULO de investigación basado en lo de mi DEA

Conclusiones del DEA

|
Como prometí, un último post sobre el DEA (para enterrarlo definitivamente y seguir adelante).

Quiero escribir aquí las conclusiones que, de alguna manera, resumen lo bueno y lo malo que, desde mi experiencia, ha supuesto el DEA; lo que he sacado de provecho, y lo que me ha parecido una pérdida de tiempo.

De positivo, voy a repetir cosas que ya dije, porque ya las intuía o ya las sentía así antes de terminar esta etapa, y añadiré otras, de las que he sido consciente a posteriori.
  • Si te lo tomas mínimamente en serio, el DEA te sirve de entrenamiento o simulacro general para una futura lectura de Tesis o una oposición a Profesor Titular de Universidad. Me muero sólo de pensar si esto hubiera sido mi Tesis en lugar de mi DEA. Ahora ya sé lo que es esto de prepararte para que un tribunal de profesores te evalúe.

  • Satisfacción y reafirmación personal. Ver el fruto de tu esfuerzo, valorado y objetivado. Siempre que el tribunal valga la pena, claro.

  • Que te conozcan más y mejor, tus propios compañeros de Departamento. En mi caso, creo que muchos creían que yo sólo era un profesor simpático, que posiblemente tenía buenos resultados como docente, pero que no daba un palo al agua, en lo que a investigación se refiere, o que no valía, o que no me sabía centrar. El día del DEA, me quedé tranquilo porque lo que expuse era sólido y consistente, sin ser una gran maravilla (no era una Tesis, pero tampoco un estudio con dos gráficas, ni un copiar y pegar de la bibliografía consultada, ni un PowerPoint con efectos graciosos).

  • Más allá de que te conozcan, también pones tu trabajo delante de todos, y te lo valoran, no sólo en el sentido de evaluar, sino en el sentido de que le dan el valor que tiene. Yo, como decía, sé que mi trabajo estaba bien, pero me di cuenta, al exponerlo y al escuchar los comentarios de mis compañeros-Tribunal, de la (mucha o poca) magnitud y trascendencia de mi trabajo. Sé, mejor que antes de exponerlo, lo mucho o poco consistente que es, cuál es su validez científica. En mi caso, sentí que me enriquecía exponer el trabajo. Está muy relacionado con el punto anterior. El día siguiente a la exposición, algún compañero ya estaba dándome sugerencias sobre cómo mejorarlo o sobre por dónde continuar... Es como si hubiera ganado un poco de reconocimiento, como si ahora ellos me vieran en otro nivel, un poco (que no lo estoy). Pero, sobre todo, he puesto mi trabajo a la luz, y eso le da vida, y lo valida.

  • Relacionado con todo lo anterior, y como colofón, ahora tengo más claro que antes cómo enfocar mi Tesis, y mis pasos futuros relacionados con el trabajo desarrollado en el Doctorado (artículos, etc.). No sé; quizás alguien pueda pensar al leer esto que necesito demasiado de la aprobación de los demás... No es eso. Pero al obligarme a cerrar el trabajo de Doctorado e intentar que fuese algo bien presentado, y al escuchar los comentarios de los demás, me doy cuenta de que lo que he hecho realmente tiene validez, y sé que puedo seguir adelante.

  • De hecho, ese es otro beneficio. Repito; ahora es cuando siento que he dado un paso, en el que consolido todo lo que he hecho, y que puedo seguir adelante (hacia la Tesis). Y tomo fuerzas para ello. Es un empujón hacia delante.


Si lo piensas, es un trámite. Muy mal tiene que estar el trabajo de investigación para que te suspendan en el DEA...

Vamos con lo negativo.
  • Lo primero es lo que he dicho. Es un trámite. No es otra cosa que eso. Y el esfuerzo que hay que dedicarle es desproporcionado a la validez real y objetiva que tiene. La mayoría de los beneficios arriba mencionados son más subjetivos que objetivos.

  • Si dura demasiado, puede convertirse en una losa que pesa demasiado (como cualquier cosa que no consigues terminar y que condiciona el poder seguir avanzando). Esto es agravado de nuevo por el hecho de que, en el fondo, se trata de un trámite. O sea, además de ser un trámite, puede condicionar seriamente el resto de cosas realmente importantes que llevas entre manos.

  • Si tienes la desgracia de que tu Tesis NO está relacionada con tu DEA (por el motivo que sea), el DEA se convierte en un bonito experimento, en una bonita experiencia, sí, pero también en una perfecta pérdida de tiempo. Para preparar la Tesis, tendrás que partir de cero, y repetir todo el proceso que ya seguiste para ese maldito DEA (empezando por la búsqueda bibliográfica, y siguiendo por quedarte en blanco, etc.; revivir el calvario desde la casila de salida). No digo que este sea mi caso, por suerte, pero sí que es cierto que mi Tesis no es una exacta continuación de mi DEA, sino un tema relacionado; el DEA seguramente se convertirá en un capítulo final de mi Tesis, pero este verano ya estuve iniciando una nueva revisión bibliográfica para mi Tesis, como quizás recordaréis.

  • Y hago referencia a mi anterior post para mencionar el resto de cosas negativas que ya nombré allí, y que se pueden resumir en el agobio y el estrés, y la sensación de estancamiento y de no terminar nunca, que se experimentan cuando estás metido en harina, pero que después se olvidan rápidamente, la verdad.


Por último, comentaré que intento seguir siendo el mismo. Como comentaba arriba, quizás ahora algunos me conocen mejor, y valoran más mi capacidad como investigador, pero yo intento no creérmelo, no hacer como algunos que leen la Tesis y ya se creen que pueden permitirse el dar consejos a todo el mundo, y hablan como si fuesen ministros, o qué sé yo.

Quiero seguir siendo el mismo. De momento, creo que no me ha dado por ese engreimiento o subidón, ni, por otro lado, tampoco he sentido ningún bajón por el sobreesfuerzo de estos días pasados. Esperemos seguir así. Ahora, sólo busco normalidad, rutina, organizar mi tiempo...

Suficiencia investigadora: OK

|
Soy apto para la investigación. He superado la prueba para la acreditación de la suficiencia investigadora. Tengo el DEA (lo tendré, previo pago de la correspondiente tasa). ¡¡¡He pasado la prueba del DEA!!!

Un trámite, pero al mismo tiempo un paso importante, y un peso que me quito de encima.

La verdad es que ahora queda muy lejos lo mal que lo pasé los últimos días.

La exposición en sí fue bien. Comencé un poco nervioso, e incluso se me olvidó el nombre de un tipo de gráfico que debía nombrar; me quedé en blanco. En el momento en que conseguí meterme en lo que estaba exponiendo, como si estuviera explicando en clase, cuando me olvidé de que estaba delante de un tribunal, fue cuando me solté y me sentí cómodo. Desde mi punto de vista, fue una exposición más que aceptable. Quedé contento y tranquilo, en ese aspecto, porque no metí la pata en nada importante.

Después, vinieron las preguntas del tribunal. En el caso de mi Universidad (no tengo claro si es así en todas), el tribunal del DEA lo forman 3 personas. Dos de ellas deben ser profesores del Departamento responsable del programa de Doctorado; además, uno de ellos debe ser catedrático. El tercer miembro del tribunal debe ser un profesor ajeno al programa de Doctorado.

En este caso, por tanto, tenía a dos compañeros del Departamento en el tribunal, y a un profesor de otro Departamento, pero que también conocía de vista.

Este último sólo me hizo una pregunta-sugerencia, que me gustó, porque era algo en lo que había pensado, así que pude lucirme mínimamente.

Uno de los profesores de mi Departamento sólo hizo que felicitarme y casi alabarme, diría yo. Incluso reconoció que le falta ponerse un poco al día en los temas que expuse..., a pesar de que imparte un curso de Doctorado relacionado con el tema de mi DEA. Fue muy halagador, en todo caso.

El último en hablar fue el catedrático de mi Departamento; un profesor relativamente joven. Me felicitó por el trabajo realizado, pero quiso puntualizar algunos detalles.

Este profesor tiene fama (y él mismo reconoció) de poner siempre la puntilla, cuando es tribunal en alguna Tesis o algún DEA. Cosa que, por otra parte, es normal. No van a ser todo alabanzas huecas, aunque se dice que en la Universidad española se dan mucho los tribunales benévolos, benignos o inofensivos, por decirlo de algún modo.

Bueno, la cuestión es que este hombre, siendo totalmente correcto, no dejó de avisarme de que debía tener cuidado con algunas de las afirmaciones que había(mos) vertido en el trabajo de investigación, porque podían dar lugar a malinterpretaciones.

Digamos que no le quitó validez a lo que presenté, pero opinó que faltaba un poco ubicarlo, para que no parezca que pretendemos abarcar demasiado o que queremos equiparar nuestra propuesta a otras cosas que, según él, no son comparables (y que son su tema preferido). Siendo malos, diríamos que quiso hablar de su libro. Realmente, habló desde su experiencia, y me pareció muy útil, la verdad (y más aún ahora, después de haber reposado un poco todo).

Sé que suena muy raro lo que he escrito, pero es que es difícil explicar lo que dijo el Catedrático Joven (este será su mote en este blog) sin desvelar en qué área investigo.

Yo creo que supe contestarle (tenía razón en sus indicaciones, en el fondo), pero mi tutor de DEA y futuro director de Tesis quiso rebatirle, y fueron ellos dos quienes terminaron enzarzándose un poco (frases del estilo "Sí, pero no, porque...").

Acudieron a vernos (actuaba también otra compañera, Rita) mi pareja, y algunos compañeros del Departamento, sobre todo profesores jóvenes o becarios de investigación; algunos están empezando ahora con los cursos de Doctorado.

Cuando terminó todo, me sentí aliviado, contento, descansado... Fue un día agradable, la verdad. Me olvidé del estrés de los últimos días. Y vi que valió la pena.

Dejo pendiente (porque este post ya es suficientemente largo, y porque me muero de sueño) escribir un post final acerca de lo positivo y negativo que, según mi experiencia, tiene del DEA (completando así lo que ya escribí antes de llegar al final).

Ya está ahí (el DEA), o agonía en el Huerto de los Olivos

|
Sigo ultimando la presentación de PowerPoint que usaré para exponer lo trabajado y aprendido durante el Doctorado, delante del tribunal que, dentro de unos días, evaluará mi suficiencia investigadora.

Apto o no apto. Eso será todo. La verdad es que estoy deseando que esto pase ya. Tanto esfuerzo para una formalidad a la que todos (tribunal incluido) quitan trascendencia.

La parte positiva de todo esto, lo más positivo (no sé si lo único), es que esto me sirve de ensayo, de entrenamiento, para una futura Tesis o una futura oposición a Profesor Titular (funcionario). Lo comentaba con mi director de Tesis, y está de acuerdo. La verdad es que, no lo valoras en el momento, pero la experiencia que estas cosas van dando, en todos los sentidos, es importante.

También hay algo más, de positivo (pero menos tangible): la satisfacción personal de dar un paso más, hacia la Tesis. Más que satisfacción por el esfuerzo, sería un refuerzo, un empujón de ánimo, algo así como madurar, curtirse, afianzarse, tomar fuerzas (autoconfianza)... Mezclado con esto, queda la sensación agradable de haber conseguido plasmar y presentar al mundo todo el trabajo que llevas realizando en los últimos años.

En lo negativo... Muchas cosas. Más allá de la sensación de falta de libertad... se me acaba el tiempo útil de investigación de este curso. He descuidado bastante algunos aspectos de mi vida personal, sin llegar a ser algo trágico; pero sí he descuidado bastante mi alimentación, mi salud (he pospuesto algunas visitas al médico), mi tiempo de ocio... Me gustaría tener mucho más tiempo para estar con la gente (mis amigos, mi familia, mi pareja...), y poder ser ser más yo, cuando estoy con ellos.

Muchas cosas que cambiar, cuando termine el DEA. Poco a poco. Y NO hay que echarle la culpa sólo al DEA, pero... un poco sí.

Como anécdota, comentaré que los alumnos de la asignatura en la que sólo imparto prácticas este año, se enteraron por La Motera (la profesora de teoría) que estoy a punto de presentar la tesina (como antiguamente se llamaba a esta prueba, o a algo equivalente). Bueno, pues más de uno me deseó ánimos y suerte (de una manera bastante espontánea, diría yo). Les debo las prácticas corregidas de las últimas 2 ó 3 semanas, y la verdad es que se han portado muy bien; han sido muy comprensivos.

No sé... En el fondo, estos momentos también son bonitos.

Cuenta atrás

|
Comienza la cuenta atrás para el DEA.

Hoy es el primer día en que he sido realmente consciente de lo poco que falta, y me he puesto un poco nervioso, al ver todo lo que todavía me queda por hacer.

Las clases no me van a quitar mucho tiempo esta semana. Ahora agradezco tener pocas clases en este cuatrimestre...

Hábito de estudio

|
Ayer tuve clase con mis queridísimos alumnos de las 8 de la madrugada, y la verdad es que fue muy bien.

Mi intención era clarificar todo lo que quedó enredado y poco claro en la práctica anterior al puente, y conseguí eso y que la práctica de ayer la hicieran mucho mejor. Les sirvió para machacar y afianzar conceptos. Creo. Siempre está el riesgo de que reseteen el fin de semana...

El caso es que estoy siendo más consciente que nunca de lo importante que es repasar y machacar las cosas, en el estudio personal.

Reconozco que nunca he tenido mucho hábito de estudio o, mejor dicho, mucho dominio de técnicas de estudio. En general, lo que me gusta y es fácil, se me queda (lo retengo) de manera bastante automática, sin mucho esfuerzo.

Pero quedan los otros casos posibles: lo fácil que no gusta, lo que gusta pero no es fácil, y lo que ni gusta ni es fácil; fácil/difícil o sencillo/complicado o corto/largo, como queráis.

Ahí es donde me doy cuenta de que, para poder avanzar (aprender cosas nuevas), (me) hace falta esfuerzo y constancia. Y me doy cuenta de todo esto ahora porque, claro, sigo estudiando. El Doctorado, fuera de toda broma, es también una época de aprendizaje. Y también me he puesto últimamente con el inglés, porque me doy cuenta de que, de no practicarlo, he perdido mucho...

Esa es otra: lo que no practicas, se olvida. O sea, el aprendizaje, el avanzar, el ampliar conocimientos o el afianzar los que ya has adquirido... es algo continuo, cíclico. A veces, hay cosas que se quedan en algún recoveco del cerebro, y que de repente saltan; estaban ahí, escondidas entre algunas conexiones neuronales, y de pronto algún resorte las hace aparecer, emerger a la superficie de la consciencia...

Se nota que es viernes; hora de la siesta, para más datos.

Bueno, total, que la semana, bien. Sigo avanzando con la memoria del DEA, que, por cierto, ya tiene fijada la fecha para su presentación: dentro de unos 10 días, más o menos.

PD: Sí, lo sé, últimamente utilizo mucho la palabra machacar, y no sólo en este blog (pero sí con el mismo significado). Pero es que es tan gráfica... ¿Qué otra palabra más... fina podría utilizar?

Tenemos un plan

|
Bueno, a estas alturas ya paso de todo este rollo, pero no está de más comentar que ya se ha decretado, entre otras muchas cosas, el cambio en la estructura de las enseñanzas universitarias españolas, para adaptarlas a las europeas.

Lo comenta topo universitario en su blog:

A mí lo que realmente me importa saber es cuándo nos llamarán a capítulo (y no lo digo en el sentido figurado, sino en el literal —acepción n.º 5—) para rehacer los planes de estudio y los contenidos de las asignaturas, y cómo nos afectará en cuanto a número de asignaturas, de grupos y de alumnos por asignatura. Y si podremos o tendremos capacidad (y alumnos) para impartir másters oficiales, que serán los cursos de doctorado del futuro.

Bueno, pues eso. Ojalá podamos decir aquello de "Me encanta que los planes salgan bien".

Bajar del puente

|
Puente Mackinac, inaugurado el 1 de noviembre de 1957Preparando ya el retorno tras el puente del 1 de noviembre...

Al final, hoy he hablado con La Motera, y ya está claro que tenemos que machacar más algunos conceptos que no quedaron claros...

También, a mis queridos alumnos de las 8 de la madrugada de los jueves, voy a escribirles un e-mail recordándoles que después del puente veremos lo que no quedó claro la semana pasada, y que se traigan leído y repasado el enunciado de esa práctica maldita.

El nivel de los estudiantes

|
¿Vosotros sabéis que los libros no están sólo para hacer bonito en las estanterías?

Que tengas que decirle eso a un alumno de Universidad (de una Universidad española, no lo olvidemos) es para reír, por no llorar, porque realmente es triste. Pero es así.

Se trata de una anécdota auténtica, protagonizada por mi compañero Chus y dos alumnos suyos. Y eso que son de los que van a tutorías, o sea, de los que supuestamente se interesan por la asignatura y van a preguntar cuando no entienden algo.

Yo suelo ser más sutil, pero es cierto que a veces te dan ganas de preguntar a algún alumno cómo aprobó le aprobaron la ESO.

Sin faltar al respeto, pero es lo que hay. Existen profesores mediocres, horribles, pasotas, deficientes... pero también hay (y abundan) alumnos que creen que ir a clase es como ir al cine (o al fútbol), gente que no se sabe en qué estaban pensando ellos o sus padres cuando decidieron mandarlo a la Universidad. ¿Qué les hemos hecho nosotros?

No, no, en serio... No pasa nada. Aquí los aguantamos muy bien, pero lo de educarlos era en el colegio, no aquí. En mis clases, encuentro de todo. Desde alumnos muy buenos, brillantes, etc., hasta alumnos que muestran un interés CERO por todo, maleducados, inmaduros..., pasando por el alumno no muy inteligente pero trabajador y responsable. Y a todos intento explicarles el temario; pienso en todos (o lo intento) cuando preparo mis clases, y cuando las imparto. Bueno, mi pensamiento, en concreto, es: "Estoy dándoos esto, es para vosotros. Quien quiera, que lo tome y lo aproveche". Es decir, aquí estamos para facilitar la tarea del aprendizaje. Siempre he dicho que me siento un facilitador... Mi director de Tesis dice que somos como entrenadores; vale, también me gusta.

Ahora, el que viene a pasar el rato, mejor que se quede en casa. Aquí no impartimos (de momento) ningún Máster en Mus y otros Juegos de Cartas con Baraja Española (tendría éxito... ¿no?).

PD: Ahora recuerdo que ya hablé de esto, desde un punto de vista con un enfoque más irónico, metafórico y reflexivo, no tan quejica como hoy.

Evolución en el blog

|
Iba a hablar de cambios en este blog, pero creo que más bien es una evolución.

He modificado un poco el aspecto del blog: tipos de letra, colores, líneas... Poco a poco, me voy atreviendo a alejarme más y más de la plantilla estándar que tomé de Blogger. Un día de estos, cuando termine la Tesis (es una manera de hablar), ya me plantearé hacer una plantilla propia.

También, sigo añadiendo entradas y novedades en los menús laterales.

He añadido mi careto ficticio a mi perfil. Últimamente, he incluido algunos blogs al apartado de Bibliografía fundamental: Cartilleros (un blog que trata de las frases y situaciones disparatadas que puede escuchar un día cualquiera un médico en un servicio de urgencias), Detalles para mi pareja (un blog personal con ideas y sugerencias muy interesantes), etc.

También, acabo de abrir un nuevo apartado, titulado English bites (algo así como "bocaditos de inglés", pero es que, lo traduzcas como lo traduzcas, suena fatal), donde quiero ir añadiendo recursos interesantes para aprender y practicar inglés, así como páginas de referencia y consulta.

Comienzo añadiendo la Radio de Vaughan, Vaughan Radio. Vaughan System es un método de inglés que se ha puesto de moda últimamente, sobre todo por el reciente lanzamiento, por parte de un periódico de ámbito nacional, de un curso de inglés basado en dicho método.

La Radio de Vaughan es como un curso de inglés continuo; escuchadlo para haceros una idea de lo que os quiero decir. En la página de Vaughan Radio puede consultarse la parrilla de programas. El programa estrella es Cloverdale's Corner, el ricón de Cloverdale, que puede bajarse desde dicha página en formato MP3.

No es la panacea; ningún método lo es (a no ser que el método consista en dejarte caer en medio de un pueblo perdido de la Inglaterra profunda). Pero me gusta la filosofía o metodología que sigue y promueve, basada en la escucha activa y la repetición constante, por parte del alumno, de frases y estructuras. Machacar a base de repetir, hasta que metas esa estructura en tu cerebro y la uses de forma natural al hablar en inglés.

Menudo rollo que acabo de soltar...

Bueno, lo único que quería explicar, por si a alguien le sirve, es que, de los dos enlaces que he añadido sobre Vaughan Radio, el primero funciona bien si copias la dirección y la abres desde Windows Media Player. La otra ("Alternative") abre una página web que lleva incrustado un reproductor. Yo prefiero la primera modalidad: una vez has abierto la página con el reproductor de Windows, siempre lo tendrás en la lista de direcciones recientes.

Siempre hay cosas difíciles de explicar

|
La semana que termina ha sido más productiva que la anterior, en cuanto al DEA. Todavía me falta un poco, pero ya mi director de Tesis le ha echado un vistazo a lo que llevo redactado, y también se ha decidido el tribunal... La fecha, todavía no se sabe, pero será para mediados de noviembre, seguramente.

En cuanto a las clases... la semana ha sido un poco más durilla, digamos.

No hay mucho que comentar... Simplemente, estamos ya en el momento del cuatrimestre en que has contado todas las cosas básicas, los temas introductorios en los que casi ningún alumno se pierde, y ahora comienza lo bueno.

Pues bien, tanto en la asignatura que doy los jueves, como en la que sólo doy prácticas este año (los miércoles por la tarde), ese salto de dificultad ha salido mal; la gente la mayoría de los alumnos se perdió.

Y en gran parte ha sido debido a que no he sabido medir bien la dificultad de lo que estaba explicando... No he diseñado bien esa parte del programa, o como se diga.

En el caso del jueves, quise hacer una práctica basada en algo que acababa de explicar y que no se había entendido bien. No fue un caos, pero sí que se notaba que muchos alumnos iban perdidos.

Tanto en esa asignatura como en la que comparto este año con La Motera, aún estamos a tiempo de rectificar, y lo vamos a hacer: dedicaremos la semana que viene a la típica clase de repaso (dar un pasito atrás antes de seguir adelante) en la que se intenta apagar el fuego, o sea, calmar a los alumnos que empiezan a ver que de repente no entienden nada.

Bueno, tampoco fue tan radical ni catastrófico, pero sí que se corre el riesgo de perder a muchos alumnos para el resto del curso, si no se hace la típica clase de "A ver, el otro día esto no quedó claro para la mayoría. Pues ahora vamos a machacarlo más. Atentos todos, pues."

Es normal pensar: "¿cómo es posible que lleves dando esta asignatura tantos años y que todavía te pasen estas cosas?" Bueno... Cada año es distinto, y siempre hay cosas difíciles de explicar. Los alumnos son distintos, y recuerdo veces en que, con menos esfuerzo por mi parte, se enteraban más rápido. Eso por un lado.

Por otro lado, sí que es cierto que no suelo ser muy metódico (aunque sí mucho más que otros profesores que conozco) y, por ejemplo, no me apunto exactamente lo que he hecho cada año, ni tengo un esquema exacto de cada clase que voy a dar, en plan apuntes del profesor. Improviso un poco, y pienso que NO está mal, en absoluto (además de que es lo que hace que no me aburra nunca de dar clase).

En definitiva... Veo que todavía voy aprendiendo a cómo dar mejor las clases, o al menos algunos temas en concreto.

Más cosas: el DEA

|
He decidido partir el post en dos trozos, porque voy a cambiar de tema (o no), y para que no sea demasiado largo. Continúo.

Llevo con el DEA (realizando el trabajo de investigación, en realidad) desde el curso 2003-04 2004-05. Es para estar desesperado ya.

El verano pasado di por terminado el trabajo de investigación del Doctorado (por fin) y desde mi vuelta del congreso de septiembre estoy metido de lleno en la redacción de la memoria para la obtención del DEA.

La memoria es realmente para una prueba de conjunto donde se evalúa la suficiencia investigadora del doctorando; se realiza una vez finalizadas la fase de docencia (los cursos de Doctorado) y la fase de investigación (el trabajo que anteriormente he mencionado). Una vez superada la prueba (en el caso de mi Universidad, la nota es apto o no apto), puedes solicitar el DEA, es decir, el Diploma de Estudios Avanzados (título oficial con el que se acredita tu suficiencia investigadora y que, básicamente, sirve para sablear al personal, ya que se paga por acceder a la prueba de conjunto y se paga después para obtener el Diplomita).

No existe una normativa unificada, ni siquiera dentro de cada Universidad, acerca del contenido ni el formato, tanto de la memoria como de la prueba en sí. Algunos departamentos sí incorporan alguna normativa o recomendaciones propias, pero no es el caso del mío.

Por eso, decidí crear, a partir de todas las recomendaciones y sugerencias que he ido recogiendo, mi propio esquema de lo que será dentro de poco mi memoria del DEA.

Seguiré contando más detalles en otro post.

Mucho tiempo que se va (y ya no vuelve)

|
Estos últimos días no he tenido mucho tiempo de escribir. Aun así, no quería dejar de contar aquí cómo fue la semana pasada y cómo se presenta esta.

Me está costando mucho arrancar... Sigo diciendo esto, y eso que ya estamos casi terminando octubre.

La semana pasada fue muy tranquila. Tuve mis clasecitas, y se supone que todo el resto del tiempo fue para avanzar en la memoria del DEA. Al finalizar la semana, la memoria estaba prácticamente igual que al comienzo. Y eso que utilicé parte del tiempo del domingo, día en que me había planteado no hacer nada de trabajo, y así poder resetear, descansar y estar con mis amigos, mi familia, etc.

Hubo días de la semana pasada en que no me pude concentrar. Una mañana tuve que ir a buscar un papel, una factura, para poder cobrar a través del Departamento mi viaje al congreso de finales de septiembre.

Otra mañana, Póker, de la cual ya os hablé en una ocasión, llegó al despacho de Zoe y mío bastante hecha polvo, por diversos asuntos que lleva entre manos, y... bueno, hubo que estar con ella, de alguna manera.

O sea, que algo de distracciones sí tuve, pero no tantas como para no haber hecho nada. Además, sé que he perdido el tiempo, que me he despistado haciendo lo que no tenía que hacer...

Bueno, sea como sea, esta semana creo que la empiezo más centrado. Ya veremos si termino con esta memoria...

Necesito un poco de café... o una siesta

|
Por primera vez en este blog, escribo desde la clase de prácticas informáticas de una de las asignaturas que imparto este cuatrimestre.

Desde mediados de septiembre y hasta fin de año, todos los jueves tengo que estar plantado en la tarima a las 8.00h, hasta las 10.00h, y después casi siempre tenemos prácticas, como hoy, de 10.30h a 12.30h.

Llevo bastantes años impartiendo esta asignatura, y me gusta mucho... Ya es un clásico, para mí, levantarme los jueves y salir a la calle cuando aún es bien de noche, pensando en el café que me tomo de camino, y que me termina de despertar y activar.

Pero, cuando llegan estas horas, estoy ya como si fueran las 2 de la tarde...

Se impone comer pronto, y hacer una buena siesta. O, si no es posible... un poquito de café.

Hay gente que necesita un poco de café extra para aguantar el día...

Semana contra la pobreza 2007

|
El próximo 17 de octubre se celebra el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza (bueno, la celebración será realmente cuando no haga falta un día así).

Somos la primera generación capaz de acabar con la pobreza. Los Objetivos del Milenio fijados por la ONU suponen un compromiso en firme por parte de los países de todo el mundo por acabar con la pobreza y la desigualdad.



Con el fin de sensibilizar y movilizar a la sociedad y presionar a los gobiernos para que cumplan su compromiso, la Alianza Española contra la Pobreza (un colectivo que agrupa a más de mil ONG y organizaciones sociales) ha convocado la Semana contra la pobreza, del 15 al 21 de octubre.

Durante toda la semana se sucederán por toda España una serie de actividades, que culminarán con manifestaciones el domingo día 21, en las principales ciudades del país.

¿Qué puedes hacer tú? Mucho. Como mínimo, informarte.

Y ahora no tienes excusa: entérate de qué actividades se realizan en tu ciudad durante la próxima semana y, sobre todo, ACUDE A LA MANIFESTACIÓN, el día 21.

Aquí tenéis algunos enlaces interesantes:

ABRAMOS LOS OJOS.
PONGAMOS NUESTRO GRANITO DE ARENA PARA TERMINAR CON LA POBREZA.

Correo no entregado

|
Me gustan los cómics, viñetas, etc. que, de alguna manera, resultan graciosos no tanto por el contenido sino por la forma, por la manera de presentar el chiste... por el impacto visual... porque son bonitos (en un sentido amplio y subjetivo, claro por supuesto). También viñetas con frases cortas chocantes, irónicas...

Dentro de esa descripción metería, por ejemplo, las creaciones de la marca Last Lemon Vimrod y Harold's Planet, que suelo seguir de cerca.

Hoy añado otra dirección dentro del apartado "Recursos para el aula" de este blog:

El hallazgo ha sido gracias a ALT1040.

Su autor, además de publicar unas viñetas sencillas pero divertidas y chocantes, ha tenido la genial idea, poco frecuente, de permitir compartir el contenido de su blog, bajo unas condiciones bastante lógicas.

Me ha gustado bastante esta viñeta (podéis pinchar sobre ella para verla más grande):

Ciertamente, ahora existe otra basura espacial...: la basura virtual del hiperespacio.

PD: Pienso, luego existo (creo).

¿Suspenden, o los suspendemos?

|
Día de (la) fiesta ¿nacional? y, por tanto, día de lectura reposada de la prensa... digital.

Leo en la versión electrónica de El País un artículo del Defensor del Lector en el que, de pasada, hace un comentario que me interesa.

El enlace es este (no es gratuito):

Copio aquí el párrafo que me interesa:
[...] Manuel González Méndez envió este comentario al titular "La sanidad española suspende en listas de espera e información al paciente", publicado el pasado martes en la sección de Sociedad. "El que suspende al alumno o examinado es el tribunal correspondiente. El alumno que recibe la papeleta correspondiente con el 'suspenso', no suspende, sino que ha sido suspendido. El que suspende, vuelvo a repetir, es el tribunal o autoridad que examina", señala el lector. [...]

Bueno... Toda la vida diciéndoles a los alumnos "No somos los profesores quienes os aprobamos o suspendemos. Sois vosotros los que aprobáis o suspendéis", como intentando hacerles ver que el resultado final depende fundamentalmente de su esfuerzo, y que nosotros sólo somos facilitadores y evaluadores de los resultados finales... y ahora resulta que, al menos lingüísticamente, somos nosotros los que los suspendemos...   :-(

Ya me han dado las notas

|
¡Ya me han dado las notas, yupiiii! Me refiero a los resultados de las encuestas de evaluación del profesorado, que se pasan a los alumnos durante el curso. Tienen la decencia de pasarnos los resultados una vez ya ha terminado el curso (¿será para evitar represalias en la convocatoria de septiembre?).

Este curso (bueno, el curso pasado) he cosechado resultados verdaderamente espectaculares, mucho mejores de lo que yo esperaba.

Concretamente, han sido los siguientes:
  • Asignatura 1 (troncal, 1.er ciclo):
    12 alumnos encuestados, nota media: 9,25

  • Asignatura 2 (optativa, 2.º ciclo):
    17 alumnos encuestados, nota media: 9,53

  • Asignatura 3 (troncal, 2.º ciclo):
    65 alumnos encuestados (2 grupos), nota media: 7,64

  • Asignatura 4 (obligatoria, 1.er ciclo):
    19 alumnos encuestados, nota media: 8,04

  • Asignatura 5 (troncal, 1.er ciclo):
    24 alumnos encuestados, nota media: 7,33

[Las notas medias de cada asignatura, NO nos las dan calculadas directamente (aunque sí se sabe la traducción numérica que se hace de las respuestas "Totalmente en desacuerdo" a "Totalmente de acuerdo"). Yo la he calculado como la media aritmética de las notas medias de los diferentes apartados o epígrafes de que se compone la encuesta. Se podría hacer un cálculo más fino, ponderando, etc., pero no tengo tiempo ni ganas.]

No sé si me consideraréis un repelente por poner aquí las notas, pero es que, la verdad, estoy muy orgulloso y, sobre todo, contento por ver que, al final, el esfuerzo y la dedicación se ven por algún lado.

Estas encuestas actualmente se usan en mi Universidad para calcular un índice que mide tu actividad docente (también se mira si has publicado algún libro docente, etc.), y que luego se traduce en una asignación económica, de la que puedes hacer uso para comprar libros, material de trabajo o de laboratorio, etc.

Como decía arriba, yo pensaba que este curso pasado los alumnos me iban a puntuar peor. Porque, la verdad, me estaba dando cuenta estos días de que en el curso pasado, en algunos momentos, iba a dar mi clase "a saco", sin detenerme mucho en los detalles, sin pararme para hacer ejemplos o dejar tiempo para hacer ejercicios, etc.; como intentando cumplir con el programa, pero sin pensar mucho en los alumnos. Aunque siempre intento ser receptivo, claro.

Las asignaturas 1 y 2 son las que estoy impartiendo en este cuatrimestre; la 3, 4 y 5 son las que vendrán a partir de febrero. Yo soy profesor responsable de la 1 y la 2. En todas me siento muy a gusto. Los alumnos que más difíciles me resultan son los de la 5, y por eso es una alegría que me hayan puntuado así. Es casi como una relación de amor-odio, lo que tengo con esos alumnos. Ya os contaré en el cuatrimestre que viene, qué tal la nueva hornada...

La asignatura 1, la llevo impartiendo los 6 años que llevo aquí, y esta es la vez en que mejor puntuación he obtenido.

Veréis que el número de alumnos no es muy elevado... Bueno, en el caso de la asignatura 3 es alto, y aún podría ser mayor; ahí sí que tengo grupos multitudinarios. Lo que sucede es que, a la hora de hacer la encuesta, muchas veces cae cerca de exámenes, y muchos alumnos no vienen a clase.

El truco para que te salgan unas encuestas decentes, y más justas o representativas (aunque parezca lo contrario) es que te pasen la encuesta un día en que no tienes un número excesivo de alumnos en clase; más bien tirando a pocos. Los habituales, vamos, los que no fallan. Esos son los que tiene sentido que te examinen (valoren, mejor dicho); los que te han venido siguiendo durante todo el cuatrimestre. No el que llega tarde a clase, si llega, se sienta al final, resopla, y mira la pizarra como quien está viendo una película china o un documental.

Será difícil mantener el listón este año...

Por cierto, hablando de notas... Tengo pendiente comentar los resultados de los exámenes de septiembre... Estoy en ello. Pero voy a ver si curro un rato.

La pescadilla

|
Conversación que tuve con un compañero, al que llamaré Patrón, a la salida del Departamento, ¡a las 10 de la noche (volvemos a las andadas...)!

Patrón tiene asignados también 33 créditos de docencia y, al igual que yo, los tiene descompensados: en este cuatrimestre sólo ha de impartir unos 7 y pico. Él lleva más tiempo que yo en esta situación, y a veces se le ve un poco quemado. [Es un tipo genial, por cierto.]

Frase muy simple de Patrón, pero con la que nos reímos un buen rato:
"Es como la pescadilla que se muerde la cola: vas lento porque estás a 33, y estás a 33 porque vas lento; vas lento porque estás a 33; estás a 33 porque vas lento...".

Es decir, como estamos a 33 créditos, no tenemos mucho tiempo libre para investigar. Como no tenemos mucho tiempo libre para investigar, nos cuesta mucho llegar a ser Doctores (que, en el caso de nuestra Universidad, nos serviría para reducir la carga docente a 22 créditos); por tanto, como vamos muy lentos investigando, estamos a 33. Y así, hasta el infinito.

Al no tener casi clases ahora, los dos tenemos claro que es ahora cuando más tenemos que adelantar nuestro trabajo de investigación. Pero ese tiempo de privilegio (sin apenas clases) es muy escaso: pronto llega Navidad, después los exámenes de enero-febrero, y después, el cuatrimestre de los 25 créditos... Mi frase fue:
"¡Es que el periodo productivo es muy corto!"

Es que es así: el periodo fértil (en lo que a investigación se refiere) se reduce, en el caso de Patrón y mío, básicamente, a octubre, noviembre y diciembre; y algo de enero. Si quitas los puentes y Navidad... mira lo que te queda.

Esclavos del reloj

|
O esclavos del tiempo...

Hace no mucho, un anuncio en televisión hablaba de que, cuando te regalan un reloj, te regalan la obligación de darle cuerda, de llevarlo en tu muñeca, de manera que tú eres el regalado (se basa en un texto del argentino Julio Cortázar, que puede leerse entero en este sitio web, entre otros muchos).

Bueno, pues he encontrado una variante del mismo tema en forma de viñeta gráfica, que me ha parecido muy gracioso y acertado:

Por cierto, volviendo al anuncio... Yo creía que el locutor era portugués, por cómo pronuncia las "s" y las "r". Pero dicen que la voz es del mismo Julio Cortázar, que pronuncia así las "r" porque, al parecer, pasó mucho tiempo de su vida en Francia.

Leo también en el blog de Lola, en un post de hace meses que he encontrado de casualidad al hacer una búsqueda en mi Google Reader, que el texto pertenece a la obra de Cortázar "Historias de Cronopios y de Famas". Hay en ese post una mini discusión interesante acerca del significado del anuncio.

Qué cosas aprende uno sin querer...

Un congresito más a la saca (II)

|
A raíz del comentario de Trabajador (¡gracias!), amplío mi anterior post sobre el congreso en el que estuve a finales de septiembre.

La verdad es que, no sólo de este tema, sino de todos, se me ocurren tantas cosas que contar, que a veces me quedo en lo más anecdótico, y descuido lo fundamental...

En contestación directa a la última frase de Trabajador, vaya por delante que, sí, se nos obliga a coleccionar congresos. Como decía en ese mismo post, si no investigas, no vales nada, por muy bien que puedas dar las clases o mucho interés que demuestres en ello. Y, a su vez, investigar se supone que debería ser algo de gran nivel, sólo al alcance de unos cuantos (un poco pirados, o en las nubes, la mayor parte de la veces)...

Pero, a la hora de la verdad, resulta que para medir cuánto investigas, para valorar tu labor de investigación, se utilizan baremos en los que una ponencia en un congresito vale X si es nacional, 2X si es internacional, etc. Un artículo de investigación en una buena revista científica puede valer 4X, por ejemplo. Y así va todo; son las reglas del juego. Como dice el autor de este gran artículo, se valoran los resultados al peso; es decir, la cantidad, y no tanto la calidad.

[Reglas del juego que, en sí, no son muy justas, ya que es un hecho que existen áreas de investigación en las que es más fácil publicar que en otras... Si compites con los de tu misma área, no hay problema, pero cuando, además, la Comunidad Autónoma y/o el Ministerio imponen un listón o un nivel que hay que superar para llegar a ser, por ejemplo, Profesor Titular de Universidad (funcionario, para entendernos), entonces, ese listón puede ser muy fácil de alcanzar para algunos, y no tan fácil para otros...]

Para no hacer que este post sea muy espeso, voy al grano: sí, en este congreso no desaproveché la oportunidad de enviar tantas ponencias como fuese capaz de enviar y me aceptasen. Al final, aparecí como coautor en 4 trabajos, de los cuales presenté dos en forma de póster, y uno más como powerpoint. Se sabe que es un congreso en el que es relativamente fácil que te acepten los trabajos que envías.

De los trabajos que envié, me siento relativamente orgulloso. La verdad es que mi compañera Rita y yo (era la primera vez que ella presentaba un trabajo en un congreso) monopolizamos la sesión en la que participamos. Cada uno presentó una parte de un trabajo que hemos llevado a cabo recientemente, y lo defendimos bien, creo yo, aunque los resultados que hemos obtenido son todavía preliminares y evidencian que es necesario ampliar el estudio para poder obtener cosas publicables, digamos.

Algunos de los asistentes estaban realmente interesados en lo que exponíamos, y no dejaron de hacernos preguntas y sugerencias, desde una posición de mayor experiencia en el área concreta en que se ubica el trabajo. Sí, creo que se generó un debate mínimamente interesante, cosa que es de agradecer. Aun así, y lo digo no desde la prepotencia ni desde una actitud a la defensiva, casi todo lo que nos dijeron ya lo sabemos y lo estamos teniendo en cuenta; aunque, eso sí, les reconozco ese grado de experiencia que, como he dicho, dejaban entrever en sus intervenciones. También, es que en una exposición de 15 ó 20 minutos no puedes contar todo lo que hay detrás de un trabajo, sino sólo aquello que crees más destacable o interesante.

Uno de los pósters que presenté sí que me pareció a mí mismo un poco... pobre, vamos a decir. Es decir, si me hubiera guiado por: "sólo voy a contar cosas de las que realmente me sienta orgulloso, voy a contar sólo aquello en lo que tengo algo realmente interesante y novedoso que decir o aportar", entonces, quizás, no hubiera llevado ese póster. [Por otro lado, los pósters, en cualquier congreso, a veces (sólo a veces) cumplen ese papel de servir de soporte a resultados que no dan ni para una ponencia; además, es una de las maneras más cómodas de comunicar algo, y posiblemente más bonita y efectiva, si uno tiene la gracia suficiente para no desaprovechar el metro cuadrado de superficie que hay en un póster de tamaño A0, por ejemplo.]

Pero, entonces, si un investigador es más reflexivo o menos echao p'alante que otro, no iría nunca a un congreso, ni enviaría ningún artículo a ninguna revista, hasta que no tuviera algo digno del premio Nobel, por lo menos. Lo más probable es que este chico (o chica) acabase dando clases en alguna academia, o de frutero. O en un manicomio. O quizás Y, seguramente, sería feliz.

A lo que voy: hay que jugar al juego, con las reglas que hay. Si no, mejor te dedicas a otra cosa. [Bueno, a mí no me gustan demasiado las reglas impuestas desde fuera, así que siempre voy un poco a mi aire, y así me va.]

Obviamente, en mi caso, estoy deseoso de poder concluir (en el sentido de cerrar y completar) el trabajo de investigación que llevo entre manos desde que comencé con el Doctorado. Entonces, sí que me sentiré realmente orgulloso y satisfecho, cuando lo que estoy haciendo lo pueda enviar a una revista científica y me lo publiquen. Para mí, esa es, en parte, la constatación de que has hecho algo bueno, más allá de tu percepción personal. Y, déjame dejadme que incluya este comentario: ya sería la releche si, además, mi aportación se pudiera aplicar de verdad, en alguna empresa, industria, servicio, etc.

Fuera de ironías, lo cierto es que ese sería el siguiente paso, casi simultáneo a la difusión teórica de resultados: su implantación práctica. No lo descarto; sólo que, en el caso concreto de mi investigación del Doctorado, pienso que no sería productivo, no valdría la pena el esfuerzo, para lo que podría sacar, en términos de puntos de investigación. Y que ya tengo ganas de cambiar de tema de investigación, la verdad.

Del resto del congreso, incluida la sesión en la que Rita y yo estuvimos, la verdad es que me interesaron pocas cosas. Ya dije en mi anterior post que no fue un congreso de un alto nivel científico, precisamente. En una sesión, incluso me dormí, lo confieso (nada inusual en mí, por otro lado).
Clicky Web Analytics